La trampa

Por Alina Bárbara López Hernández. Nuestro Parlamento actualmente no solo está en actitud de desacato de la Constitución, sino que aplaude a dos funcionarios —uno de ellos, presidente del cónclave—, que sostuvieron una actitud contraria a lo refrendado por el 86 % de la población cubana. (Foto: Tony Hernández Mena)

Por Alina Bárbara López Hernández*

Escuché ayer a Esteban Lazo Hernández, presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular, y a la ministra de Comercio Interior, Betsy Díaz Velázquez, dirigirse a la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP) que sesiona en su último encuentro del año. Ambos citaron palabras de Fidel Castro pronunciadas en los sesenta y en los noventa. La esencia de las citas era resaltar que los derechos en Cuba son solo para los revolucionarios, jamás para los contrarrevolucionarios.

No es raro que nuestros dirigentes citen a Fidel descontextualizándolo y lo traigan a escenarios donde sus ideas son improcedentes. Tampoco es noticia que Fidel tuviera esos criterios. Nos parezcan bien o mal, como todo líder carismático no se detenía a meditar si lo que expresaba era «políticamente correcto»; intentaba arrastrar a la opinión pública con su oratoria encendida, su habilidad para presentar argumentos y hacer que las personas confiaran en él.

No me extraña igualmente el uso manipulador de los términos revolucionario y contrarrevolucionario. La colega Ivette García González ha dedicado varios artículos («Maniobrando con las palabras»; «Es hora de definir lo revolucionario»; «Antídotos contra la manipulación del lenguaje») a mostrar que son palabras talismán o palabras mordaza, encaminadas a modelar una forma de pensamiento y, sobre todo, de conducta. Si alguno de nosotros hubiera propuesto en los años sesenta, setenta u ochenta… que debíamos abrirnos a las inversiones de capital extranjero, o admitir la propiedad privada en pequeños y medianos negocios, o que era un derecho viajar libremente sin pedir permiso al gobierno; habríamos sido ubicados ipso facto en la categoría de contrarrevolucionarios.

Lo verdaderamente paradójico fue que las referidas intervenciones recibieran entusiastas aplausos de los diputados de la ANPP; de la misma Asamblea que aprobó una Constitución que norma la existencia de un Estado Socialista de Derecho y el disfrute de derechos para todos los ciudadanos y ciudadanas. A Fidel nunca lo hubieran colocado en esa situación. Jamás habría concordado con la aprobación de una Constitución tan osada. Lo suyo no era la hipocresía. «Al pan, pan y al vino, vino». Con él nunca tuvimos un Estado Socialista de Derecho. Como no lo tuvo ninguno de los países del desaparecido socialismo real. Aunque, si reflexionamos bien, tampoco lo tenemos con la Asamblea.

La Asamblea está aprisionada en un contrasentido. Ella misma —en el afán de presentar una Constitución más avanzada que su predecesora— se fabricó una trampa de la que no es posible escapar. En su disposición decimosegunda, la propia Constitución la obliga a habilitar esos derechos en un plazo de dieciocho meses. Pero tal lapso ha sido incumplido y no se informa a la ciudadanía en qué momento se consumará el mandato legal.

En consecuencia, nuestro Parlamento actualmente no solo está en actitud de desacato de la Constitución, sino que aplaude a dos funcionarios —uno de ellos, presidente del cónclave—, que sostuvieron una actitud contraria a lo refrendado por el 86 % de la población cubana.

Cada día constatamos en las redes sociales el modo en que se constriñen las libertades al que piensa diferente respecto al gobierno y se atreve a decirlo. Vemos violentadas a personas que desean ejercer su derecho a pensar y expresarse: expulsadas de las universidades, detenidas en sus domicilios sin que se les haya encausado, impedidas de moverse por las calles, con agentes de la Seguridad del Estado que les amenazan y pueden detener sin que exista una orden legalmente emitida que lo permita.

La conclusión a la que arribo es que hemos aprobado una Constitución que no es viable. Una parte de ella tiende a sostener una situación de vulneración de libertades —concretada sobre todo en su artículo 5— y otra parte reconoce tales derechos y libertades en un Estado Socialista de Derecho, concepto que es definido como: «la concepción del Estado que refleja que su estructura y funcionamiento se rigen por el acatamiento a lo establecido en la Constitución de la República y en el resto de las disposiciones normativas que conforman el ordenamiento jurídico».

Esta contradicción evidente, y sin solución posible, fue una preocupación que explicité en mi artículo «El talón de Aquiles», allí analizaba que:

(…) el aludido artículo 5 declara que el Partido trabaja, entre otras cosas por «desarrollar valo­res éticos, morales y cívicos» en los cubanos. ¿Qué valor cívico puede ser más importante que el respeto a la Constitución de la República? Empezar haciéndolo por casa sería una cuestión de principios, por ello, en lugar de ubicarse por encima de la Ley de leyes, y no permitir que ella le establezca pautas al Partido —como afirmara enfáticamente uno de los comisionados—, el PCC debería ser el primero de todos en subordinarse a los preceptos constitucionales.

Cuando se discutió el proyecto de Constitución en consulta popular, en el preámbulo se reafirmaba la novedad del concepto de Estado Socialista de Derecho, al explicar que el mismo fue incorporado «a fin de reforzar la institucionalidad y el imperio de la ley, dentro de ello la supremacía de la Cons­titución». Pues nada de esto se ha cumplido. ¿Qué hacer entonces? ¿Puede declararse inoperante a una Constitución?

*Alina B. López Hernández es Profesora y Tutora de Antropología Sociocultural y una excelente Científica Social y Política (socióloga y politóloga) de la Universidad de Matanzas. Miembro Académico Nacional Correspondiente de la Academia de Historia de Cuba. Además de Analista Sociopolítico laureada de La Joven Cuba. Para contactar al autor: [email protected]. Para contactar con la autora: [email protected]

15 Comentarios

Rolopez 69

Como siempre un gustazo leer los artículos de la profesora Alina. Se podrá estar o no de acuerdo con ella, pero no se puede negar la seriedad y la claridad de lo que plantea.

Sus dos preguntas finales me dejan pensando, lamentablemente no conozco las respuestas, pero estoy seguro que muchos de los que habitualmente comentan aquí las tendrán y serán tan interesantes como diferentes, así suele ser y me alegro mucho de que así sea. Por eso la LJC es mi preferida.

Gracias, Profesora por poner su talento y valor en servicio de las causas nobles y gracias a LJC por existir.

Saludos.

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Julia Leon Lacher

Como siempre admirando tu claro pensamiento y postura ética.

Vivimos en un Estado de Inquietud. Teniendo derecho a la paz espiritual que ofrecería la Constitucion de la República.

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Alex

Excelente, Profe.

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Alfonso Rojas

Estimada profesora mi opinion es que por lo que ud escribe, la Constitucion de su pais no fue declarada inoperante, su Constitucion simplemente no nacio, murio abortada, Ud. muy bien lo describe la contradiccion es evidente y sin solucion posible, por eso nacio muerta, con ellos nunca va a tener vigencia y como puede tener vigencia cuando por ejemplo en una AN hay un criterio unico de pensamiento?

La pluralidad de pensamiento es un requisito esencial para que una nacion pueda ser considerada democratica y en Cuba sin ningun lugar a dudas no es un pais democratico, y como lo puede ser cuando a semejanza de la novela 1984 se practica el unipensamiento?

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6del

Son funcionarios con viejos prejuicios, están descontestualizados, pero lo peor para mi es la hipocresía y unanimidad q sostiene el resto del rebaño.

Siguen abanderado viejas consignas, así no damos lecciones de democracia, mucho menos evolucionamos como país. Lamentable, pero cierto.

Doy las gracias por leer artículos tan coherentes de la realidad cubana de hoy.

Gracias por ello.

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Bárbara

Usted siempre tan lúcida.

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dario45666

Como la historia lo ha demostrado ( con creces) los regimenes de socialismo real, como el que existe en cuba, han sido exitosos en apoderarse del poder y despues, conservarlo… hasta que no pueden mas seguir con la gran farsa que en definitivas cuentan con lo que verdaderamente son.Una gran farsa.

A partir de gastar el capital apropiado, tanto material como en conocimientos, comienzan una cada libre, en la cual, se agarran a lo lo que puedan con vistas a mantener ese poder…. en esas cosas a las que se agarran pueden ser : URSS,Venezuela,medicos de alqules, constituciones, etc, etc……. No les crea mucho, Dra.

Los comunistas se han caracterizado,por no tener mucho en cuentas los compromisos politicos,pues en definitivamente ,son solo, como diria Lenin o Trosky.»convencionalismos burgueses «

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Alicia

Tal conducta era de esperar, ha seguido con métodos viejos, han negado la dialéctica, se han aferrado a un discurso obsoleto y en este caso las contradicciones no son la fuente del desarrollo porque no se resuelven a favor de los nuevo , lo superior, siguen siendo continuidad, repetición mecánica, pero ni continuidad han logrado ser, porque el país está en su peor momento, tal vez continuidad, de la miseria, de la incertidumbre, del odio, de la mediocridad….

La Revolución cubana fracasó y no han querido reconócerlo y la Constitución se viola desde sus postulados de partida, ni es Martiana, ni es Marxista.

Cuba no es una República para el bien de todos, Cuba no es un país socialista. Mi abuelo decía: De buenas intensiones está preñado el camino del infierno. A estas alturas dudo hasta que las intenciones sean buenas.

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Teresa Aguiar

Realmente excelente artículo que refleja la gran descomposición en todos los órdenes en la que está sumida nuestra patria.

Realmente usted tiene un coraje envidiable!!¡¡¡

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Jagger Zayas Querol

Estimada Profesora Alina.

Cuando redactaron el proyecto de Constitución, quisieron decir, en lugar de «Estado Socialista de Derecho», Derecho del Estado Socialista que es la realidad.

Tampoco la Asamblea Nacional del Poder Popular es el órgano supremo del Estado. El organo supremo es el Buró Político del PCC y en esa «Asamblea», el voto no puede ser otro que Unánime.

Al Diputado que ose discrepar en asuntos serios y vitales, inmediatamente le es cuestionada su condición de Revolucionario por el juez y órgano supremo, el Buro Politico. Ese es el primer paso para su defenestración y linchamiento politico. Por eso no responden a sus electores, sino a sus jueces.

La farsa y demagogia huera parlamentaria es harto conocida y el olmo no puede dar peras.

Un pensador avanzado de izquierdas afirmó que para democratizar a la sociedad, hay que democratizar la propiedad.

Si la propiedad es totalitaria, hay solo un empleador y todos los demás son simples asalariados y por tanto, todo el Derecho es para ese empleador y propietario: el Estado Burocrático,. El pensamiento es unidimensional y burdo y sólo se admite una voz: la suya y un solo derecho: el suyo.
Los demas son meros corifeos y no puede ser de otro modo.

Han sido escamoteados los principios fundacionales de la Revolución Cubana.

Nada mas.

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Fer

La claridad del artículo es notable, más clara que el agua la explicación,,pero es algo evidente que conoce todo el mundo.

Pregunto; ese será el destino de Cuba???….legislar algo y hacer lo contrario????

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zenon

El Rubicón ya quedó atrás

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Observador 2020

Muy buen artículo.

Lamentablemente, nuestra Constitución nos hace recordar a Chaflán, un humorista villaclareño ya fallecido. El decia sin sombrero las cosas que eran verdades y se lo ponía para el choteo y la chanza.

Asi es nuestra carta magna, que el poder a su conveniencia y en su personaje humanista y democrático invoca sus artículos y para su perfil intolerante y totalitario utiliza otros, lo que siempre sin sombrero.

Su reiterativo slogan de “nadie quedara desamparado” incluye también y sobre todo que nadie queda exento de su control y de su puño.

En otros comentarios he aludido al carácter circense de la Asamblea Nacional, hecha a medida de la obediencia y la incapacidad para el debate necesario.

Un destacado pensador cubano exiliado la bautizó genialmente como “Los niños cantores de La Habana” por su capacidad de constituir una sola voz y la imposibilidad de un desafino.

Desprovista totalmente de herramental para la salvaguarda de la integridad moral de la nacion y coronada por una presidencia absolutamente desbordada de su condición de guía lúcido del consenso y del ejercicio democrático para el bien de la ciudadanía. Convertidos y degenerados al papel de simples cancerberos del poder autoritario.

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Juan Pablo

Estimada, en el discurso en la Universidad de la Habana de 2010, si se lee atentamente, Fidel si da una luz a favor del Estado Socialista de Derecho (al hablar contra la fuerza bruta).

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Jose A. Huelva G

Querida profe Alina.

La Constitución y su violación ya es un mal perpetrado. Por eso era tan importante votar por el NO en su momento y denunciar el descaro para abrirles los ojos a la gente. Muchos callaron para estar bien con Dios y con el Diablo. Estas son las consecuencias.

Lo peor es que falta mucho mas.

Ahora me van a tildar de contrarrevolucionario, y es cierto, lo soy. No veo otro camino que luchar por quitarnos ese Gobierno parásito e incompetente de encima. Son gente que no hace nada por el pueblo solo vivir de él, reprimirlo maltratarlo y cuanto esté a su alcance para mantenerse en el poder. Ejemplos sobran.

Esas fueron las enseñanzas de FC. Hay que crear consciencia en el pueblo de lo mal que vamos (y hemos ido siempre) con la Revolución. No es un mensaje de odio. Es una alerta a la reflexión. Y creo que bien dentro una mayoría sabemos que es una verdad como una casa.

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