LA RED OFFLINE QUE CONECTA TODA CUBA

CodigoAbierto360°. Sin duda ʺel Paquete Semanalʺ —un compendio de aproximadamente un terabyte de información digital sobre — bautizado con ese nombre, repartido y vendido semanalmente a miles de casas dentro de la isla. Si bien oficialmente NO es Permitida su distribución, sin enbargo, en la practica, es Tolerada ya que su contenido de programas extranjeras sobre series, shows, videos de youtubers, etc., etc., no son considerados  tan toxico ideológicamente en contra del proceso cubano, lo que permite a los máximos actores políticos que gobiernan la Cuba así como a  sus decisores de politica mediáticos —los que la han valorado ʺal Paquete Semanalʺ menos peligroso y mas bien una forma de entrenamiento— lo que le permite dirigir y priorizar su accionar de Medidas Activas y recursos dirigidos a enfrentar  las diferentes Ops. Psicológicas Mediáticas y Golpes Blandos que de forma profesional, planificado, y, constante sus adversarios más acérrimo, con o sin, el respaldo de los Servicios Especiales estadunidese lanzan contra ellos utilizando, las redes sociales,

CodigoAbierto360°. Sin duda ʺel Paquete Semanalʺ —un compendio de aproximadamente un terabyte de información digital— bautizado con ese nombre repartido y vendido semanalmente a miles de casas dentro de la isla a un precio razonable conteniendo en dispositivos USB. programas extranjeras de móviles series, shows, videos de youtubers, . programas televisivos y plataformas de streaming.

Si bien oficialmente NO es Permitido Oficialmente SI Tolerado ya que conforma parte del accionar y/o medidas activas de los máximos actores políticos que gobiernan la isla —los que lo han valorado menos peligroso y hasta útil porque su contenido — dentro del marco del enfrentamiento mediático planificado, profesional y, constante que sus adversarios más acérrimos lanzan contra ellos dentro del abanico de Ops. Psicológicas y Golpes Blandos que desde el exterior mantienen y sostienen. He ahí, que unido a los cambios generacionales producidos en los nacidos en la isla entre 1982-1994 y ʺMillennialsʺ  y los  de la generación ʺZʺ; a la tolerancia gubernamental del ʺPaquete y la Antenaʺ;  junto a la interferencia de exitosa de Radio/Tv Martí conforman que parte de las planificaciones de propaganda y accionar psicológico elaboradas a orientadas y direccionar conductas ideológicas con los objetivos  de control social y, político y, más bien principalmente dirigidas las generación ʺXʺ: nacidos entre 1965 y 1981; generación ʺYʺ nacidos entre 1980 y 199, y, la GeneraciónʺZʺ: nacidos a partir del 2000. Generaciones sometida a la guerra informatica la que ha dado como resultado que una parte, no despreciables, de esas generaciones hayan partido haciaotros lugares del mundo en la busqueda de un mejor futuro en tierras extrañas.

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Fuente elTOQUE

EL PAQUETE SEMANAL

ALTERNATIVA ANTE LA DESCONEXIÓN EN CUBA

Por Alberto C. Toppin

La semana de Luis no empieza el lunes ni el domingo, sino el viernes en la noche y termina casi siempre el miércoles. Es así desde enero de 2019, cuando comenzó en el negocio de la distribución de contenidos digitales.

Luis vive en La Habana y tiene 27 años. Habla como quien piensa muy bien lo que dirá. Todas las semanas, él y un amigo, conocido como mensajero, reparten y venden el paquete semanal. El compendio de aproximadamente un terabyte de información digital lleva a miles de casas cubanas aplicaciones móviles, series, shows, videos de youtubers y más en dispositivos USB.

Su negocio no es legal y Luis lo sabe. Mientras algunos se dedican a la venta del paquete con una licencia estatal de vendedor de discos compactos, él, como tantos otros, lo hace sin declarar nada a las autoridades. Por eso no quiere que su nombre completo aparezca publicado. Hasta diciembre de 2020, 110 clientes le reportaban en total más de 100 dólares a la semana, cuando el salario medio en Cuba era de unos 30 dólares al mes. Con el reajuste monetario de enero de 2021 y la subida de precios, sus ganancias deben aumentar en apenas un dólar por cada cliente.

Los viernes, Luis agarra su moto, deja un disco duro en casa de un amigo/socio del negocio y lo recoge al otro día con más de 900 gigabytes de información dentro. Luego, distribuye ese contenido entre otros seis discos externos propios y otros dos discos duros fijos en su computadora. Regresa a casa del amigo y deja el disco para que le vayan actualizando el contenido: subtítulos de series que no estaban disponibles el primer día, programas televisivos extranjeros o plataformas de streaming.

Los domingos visita varias casas de su barrio, pide los discos externos de los clientes y copia en ellos la información. Los lunes solo le restaría transferir a esos dispositivos la actualización, que son unas decenas de gigabytes y, luego, a repartir y a recoger los discos de otros clientes para copiarles el terabyte completo de películas, series, reality shows y demás…

Aunque hay dinámicas distintas entre los paqueteros —como se les llama a quienes venden el paquete semanal—, básicamente funciona así en toda Cuba.

El fenómeno rebasa una década y comprende una cadena comercial asociada a negocios de creación y promoción de contenidos, muchas veces al margen de la legalidad. Quienes participan en el negocio se benefician de las escasas y costosas vías de acceso a Internet en el país, que impiden disfrutar de servicios de streaming con banda ancha desde los hogares.

También es resultado de las ansias de los clientes por consumir productos audiovisuales alternativos a la programación televisiva estatal que no llega a los diez canales.

Del casete de 6 horas al disco de un terabyte

No se sabe realmente quién creó el paquete semanal, aunque sí cuáles fueron sus orígenes y antecedentes: los «bancos de películas» o casas de renta de casetes VHS del mercado informal.

En Cuba, desde 1995, la recepción de canales de televisión extranjeros solo se autoriza a los hoteles —donde los cubanos no pudieron hospedarse hasta 2008—, a instalaciones del cuerpo diplomático acreditado en La Habana y a determinadas instituciones estatales y ciudadanos, varios con cargos importantes en el Gobierno. En esa época, algunos cubanos con antenas satelitales clandestinas grababan programas y películas en casetes VHS. Luego, vendían el contenido a personas que se dedicaban a rentarlos en sus casas de manera ilegal, o los rentaban ellos mismos. Era un limbo legal que, sin embargo, funcionaba en todo el país.

Con apenas dos canales en la televisión nacional de entonces, era alta la demanda de otros contenidos. Los clientes veían los audiovisuales en sus casas y devolvían los casetes para rentar otros. Así funcionaban los «bancos de películas», las tiendas cubanas.

Con la transición del VHS a los CD y DVD, el formato del negocio varió, pero mantuvo su lógica; se rentaban los discos y luego comenzaron a venderse. Así permaneció durante un tiempo, hasta que aparecieron los primeros dispositivos de almacenamiento USB. Algunos vieron la oportunidad de crecimiento: vender cierto volumen de audiovisuales a los bancos de películas y a los usuarios finales.

Entre ellos estaba YoePC, de poco más de veinte años. Vivía en el reparto Finlay, en el municipio habanero Marianao; hoy reside en Alaska. Dirigía lo que llaman «una matriz» del paquete semanal, uno de sus centros de creación, por decirlo de algún modo.

«Empecé a llevarle películas a la gente en discos duros chiquitos, de ciento y pico de gigas, y poco a poco fui levantando el negocio, pero básicamente empecé en el barrio. En bicicleta», cuenta a través de WhatsApp.

Varias personas que hoy se dedican a vender el paquete semanal han oído hablar de él. En 2015, antes de dejar el negocio para terminar la carrera de Ingeniería Informática y luego marcharse de Cuba, YoePC llegó a ganar más de 1000 dólares semanales. Tenía 20 discos externos de 1 terabyte y alrededor de 20000 dólares invertidos en tecnología para repartir contenido por casi todo el país.

La organización del paquete, al parecer, también le debe mucho. Mientras los discos externos fueron aumentando su capacidad, él les fue agregando información hasta llegar al terabyte. En una carpeta con fecha abreviada colocaba decenas de subcarpetas: Animados, Shows, Videos interesantes, Series, Aplicaciones, Música, Videoclips… Dentro de cada una, a su vez, había otras de la misma temática, y así sucesivamente hasta llegar a los materiales. De esta manera se organiza el contenido hasta hoy.

«Mientras más información pusiera, más clientes podía adquirir», recuerda. «Por ejemplo, si ponía Manuales de mecánica, iba a poder vender mi paquete a gente que se dedicara a la mecánica. Si ponía series coreanas, lo vendería a gente que le gustaran esas series, etcétera».

Hizo prácticamente lo mismo que los bancos clandestinos de casetes en VHS de los años 90 y principios de los 2000: comprar contenido en grandes cantidades, sin preguntar a sus suministradores cómo lo adquirían. Decidió no incluir pornografía ni política porque, según él, implicaría autodestruir el negocio, dadas las leyes cubanas respecto a esos materiales.

Desde 1987, el artículo 303 del Código Penal cubano prohíbe la producción y circulación de «publicaciones, grabados, cintas cinematográficas o magnetofónicas, grabaciones, fotografías u otros objetos que resulten obscenos, tendentes a pervertir o degradar las costumbres»; mientras que el artículo 103 considera como delito la confección, distribución o posesión de propaganda que «incite» contra el orden social o el Estado socialista.

Con la explosión de la clientela, el paquete en sí se convirtió en un canal de difusión. Es el Internet limitado que va de un lugar a otro del territorio cubano, no a través de antenas y cables, sino en motos, carros, bicicletas, guaguas y hasta aviones.

«Teníamos claro que teniendo un medio de difusión de esa magnitud…, gran parte de la entrada de dinero sería por promoción y publicidad», explica YoePC.

Desde hace años existen promotores que aportan música y videoclips de artistas nacionales al compendio de información, sobre todo de géneros urbanos y con poca posibilidad de llegar a la radio y televisión nacionales. Comenzaba la producción de contenidos para el paquete.

Mientras copia el paquete, Luis aprovecha para revisarlo. Abre la carpeta Películas en Full HD, con las cintas estrenadas hace unos meses en cines extranjeros, en óptima calidad. En la carpeta de Series en Transmisión busca The Blacklist, de la cadena de televisión estadounidense NBC. Ha visto, entre otros programas, Sex Education, de Netflix; The Morning Show, de Apple TV+; y Carnival Row, de Amazon Prime Video. Ve también los videos de tecnología de los youtubers extranjeros, y colecciona episodios de MasterChef España, de Televisión Española.

Luis, sus clientes y quienes copian gratis el contenido de los discos de amistades o familiares que ya pagaron, ven lo más reciente en producción audiovisual en el mundo, desde Cuba, fuera de Internet y sin necesidad de suscripción a ningún servicio.

El precio de acceder a todo esto, para Luis, es de aproximadamente 2 dólares a la semana. Él cobra al cliente final un dólar, aunque hay excepciones. Aquellos que quieran el paquete el mismo domingo tienen que pagar tanto como él, o sea, 2 dólares.

Con los cambios monetarios en Cuba en enero de 2021, que suponen una devaluación del peso cubano frente al dólar y una disminución de su poder adquisitivo, este mensajero segmentó aún más su clientela y aumentará los precios a partir de febrero.

El usuario final es quien menos gasta en la cadena de distribución; aun así, es un negocio rentable. Luis paga 2 dólares e ingresa más de 100 junto a su colega; ahora, al cambio oficial, debe gastar 4 dólares y ganar cerca de 200. Ariel, que le vende el paquete a Luis y a otras personas, pagaba alrededor de 10 dólares por el contenido e ingresaba alrededor de 60 sin moverse de su casa.

Ariel no es una matriz del paquete como lo fue YoePC porque no posee el volumen de información ni la cantidad de clientes y contactos. Cada fin de semana recibe en su casa, en las afueras de La Habana, el paquete semanal conformado por dos matrices distintas: Estudios Odisea y ETRES. Con estos confecciona su propia selección, pero sin marca personal. Elimina contenido repetido y la carpeta de religión. De los programas que salen en dos resoluciones, alta y estándar, deja aquellos episodios de menos volumen.

Cuenta que, aunque algunas personas se han quejado de la reducción de contenido y han contratado otra fuente, luego regresan a comprarle a él porque entienden que otros paqueteros incluyen material innecesario.

Desde las instituciones cubanas también se considera que, dentro del paquete, hay contenido basura. Pero a diferencia de Ariel, no se refieren a ligas desconocidas de fútbol ni contenido religioso. Dentro de lo prescindible para el Gobierno cubano están los reality shows. La Mochila, alternativa gubernamental al paquete, no los incluye en sus carpetas. Ofrece una propuesta políticamente apropiada y se consume muchísimo menos. Incluso, reproduce contenido que reparten los paqueteros. En una investigación de la Universidad de La Habana, Abel Prieto, entonces asesor del Consejo de Estado, expresaba que «el paquete tiene una eficiencia en términos de distribución que La Mochila está muy lejos de conseguir».

No hay cifras exactas del consumo del paquete ni de La Mochila, sin embargo, es notable que el primero se consume mucho más que la segunda. En una encuesta realizada por elTOQUE y en la que participaron aleatoriamente 204 personas, nadie declaró consumir La Mochila.

Solo hay tres vías para adquirirla: a través de Internet, al visitar una sede de los estatales Joven Club de Computación y Electrónica o, hace poco más de un año, desde las casas a través de Tinored, la red inalámbrica desplegada por los Joven Club. Aunque este paquete del Gobierno tiene más de seis años y la institución que lo respalda cuenta con más de tres décadas de creada, no tiene servicio a domicilio.

Según Joven Club, solo 28 mil usuarios tienen acceso a La Mochila desde sus viviendas. En provincias como Sancti Spíritus y Santiago de Cuba, por ejemplo, no pasan de 500, respectivamente.

En el caso de La Habana, en junio de 2020 la revista de los Joven Club, Tinoestablecía en 12444 los usuarios que podían acceder a La Mochila mediante Tinored. La capital cubana tiene más de 2 millones de habitantes y por encima de 709 mil viviendas.

CADENA DE DISTRIBUCIÓN DEL PAQUETE SEMANAL

1.- Personas que se dedican a grabar y a descargar contenidos con satélites de TV y software en Internet.

2.- Promotores musicales: recopilan la música cubana grabada en estudios independientes.

Casas matrices

Organizan la información proveída por promotores y quienes graban y descargan contenidos, para luego venderla. Agregan publicidad de elaboración propia o creada por agencias publicitarias.

Primeros compradores

Lo adquieren en las casas matrices y lo revenden, muchas veces mediante mensajeros.

Segundos compradores

Lo adquieren de los primeros compradores. Muchas veces mezclan los paquetes de varias casas matrices. Venden a clientes finales o revenden a mensajeros, y con frecuencia añaden contenido (ofertas de recargas, venta de ropas…).

Mensajeros

Lo adquieren de los segundos compradores y lo llevan a los clientes finales. Con frecuencia añaden nuevo contenido (ofertas de recargas, venta de ropas…).

Clientes finales

Lo compran a segundos compradores o esperan por mensajeros que se lo llevan a sus casas. También lo obtienen gratis de otras personas que antes pagaron por este. Consumen el contenido en televisores y computadoras.

Mega a mega, giga a giga

La distribución del paquete tiene varios niveles. Tres casas matrices principales —Estudios Odisea, Crazy Boy y ETRES—, ubicadas en La Habana, se encargan de recopilar el contenido y venderlo. Los compradores/revendedores del paquete están en otro escalón: obtienen la información directamente de las matrices o de mensajeros que la obtuvieron de estas, y la venden a otros compradores/revendedores de nivel más bajo —como Ariel—, a consumidores cercanos y a los paqueteros/mensajeros.

Los paqueteros/mensajeros —como Luis— compran el contenido y lo llevan directamente a las casas de los clientes.

Según Alejandro (Ale Odisea), uno de los principales rostros detrás de la matriz Estudios Odisea, el paquete semanal sale de La Habana en taxis estatales y privados, guaguas, trenes y buses. «Las primeras manos —quienes reciben el paquete— varían también por provincia. Tenemos tres en Sancti Spíritus, dos en Camagüey, en Santa Clara…».

En cada provincia hay compradores/revendedores que se encargan de recibir el paquete y venderlo a otros que luego continúan su distribución. Ellos no influyen directamente en cómo está organizada la información, pero en algunos territorios sí insertan publicidad de negocios locales o eliminan elementos.

Aunque el esquema de distribución hacia las provincias está bien aceitado, no es perfecto. No existe garantía de que lleguen todos los contenidos a todos los rincones de la geografía.

Un usuario llamado Yosján comentó a elTOQUE que, cuando consumía contenido a través de la compra directa a receptores del paquete en Pinar del Río, algunos programas como el reality de cocina MasterChef llegaban de manera esporádica. Otros productos que veía mientras estudiaba en una universidad habanera —La Voz España, por ejemplo— ni siquiera se conocían en su provincia.

Las actualizaciones del paquete son hoy de un terabyte diario, no semanal, según Ale Odisea y otros distribuidores del paquete. Sin embargo, ese aumento se debe a que muchas veces traen contenidos de gran tamaño. Ariel menciona algunos: películas en Blu-Ray y en 3D, que no tienen mucho mercado por razones tecnológicas. «Estamos hablando de filmes que se llevan 40 gigas», asegura.

En los tiempos iniciales del paquete semanal, organizar todo el contenido entre dos personas podía tomar hasta cuatro horas. Alien García, un programador de Centro Habana que fue cliente de YoePC, redujo el tiempo drásticamente. Ideó varios software independientes que terminaron siendo un programa único para renombrar archivos, moverlos, transformarles el formato y otras opciones.

«Gestor de paquete tiene varios módulos y cada uno se dedica a realizar una función», explica Alien, y pone ejemplos: «el módulo Seriados puede cambiarle el nombre a mil, 2 mil videos en apenas unos minutos. El programa también es capaz de introducir el contacto de la casa matriz en los subtítulos de las películas y las series, a modo de publicidad. En cuanto a la música, les adiciona nombres a los archivos de audio».

Todo el contenido que organiza el gestor de paquetes no se obtiene de una sola fuente. «Hemos adquirido equipos con el transcurso de los años», explica Ale Odisea. «Existe el DirectTV, tenemos HitLatino, tenemos YouTube, tenemos mejor Internet que antes», añade.

«Uno del equipo se encarga de hacer las descargas de música», dice Hansel Promo, de la casa matriz Crazy Boy.

«Para eso necesitas buena inversión con equipos inalámbricos como nanos, routers, TP-Link y MicroTik, y una computadora que esté apta para abarcar tanto contenido en tan poco tiempo. De ahí es de donde se saca toda la música internacional, las novelas… Tienes que tener acceso a cuentas de Netflix, iCloud, Google, con variantes que en Cuba no están al alcance», agrega.

Para disponer de estos recursos y de otros, muchos negocios y personas dentro de Cuba recurren a conocidos radicados en el extranjero, quienes les facilitan los accesos.

Sin embargo, Internet y las televisoras extranjeras no son las principales vías para obtener música nacional.

RESUMEN SEMANAL MATRIZ CRAZYBOY 14-09-2020

7878 files in 1516 folders (928.47 GB)

((14-09-2020))

!Concursos de Participacion

!Sitios de Anuncios Clasificados

!TV de Cuba

Actualizaciones Antivirus[Avira-Kav-Nod 32-Avast]

Animados

Aplicaciones Moviles

Aplicaciones PC

Deportes

Discografias en MP3

Documentales

Doramas [TX]

Filmes [AVI-MKV-MP4]

Filmes [AVI-MKV-MP4] Clásicos Recomendados]

Filmes [Clásicos HD]

Filmes [Estrenos HD]

Filmes [Por Sagas,Por Actores o por Genero]

Games

Humor

Interesantes

Miniseries

Música Actualizada [2020]

Musicales, Video Clips [2020]

Novelas en Transmisión [Clásicas][Cap Sueltos]

Novelas en Transmisión [Estrenos][Cap Sueltos]

Series [Dobladas al Español] [Finalizadas]

Series [TX]

Series [TX] Temporada Finalizada [Cap Sueltos]

Series [TX Clásicas]

Series Mangas [TX]

Series TV Shows [TX][Español]

Series TV Shows [TX][Ingles]

Shows Latinos

Trailers [2020]

G((14-09-2020))

NameSizeModified
!Concursos de Participacion19.28 GB9/13/2020 9:31:05 PM
!Sitios de Anuncios Clasificados1.08 GB9/13/2020 10:27:52 PM
!TV de Cuba6.20 GB9/13/2020 9:04:14 PM
Actualizaciones Antivirus[Avira-Kav-Nod 32-Avast]3.36 GB9/13/2020 9:33:28 PM
Animados57.75 GB9/13/2020 9:33:14 PM
Aplicaciones Moviles1.74 GB9/13/2020 8:48:04 PM
Aplicaciones PC5.69 GB9/13/2020 9:36:39 PM
Deportes60.45 GB9/13/2020 9:16:26 PM
Discografias en MP32.19 GB9/13/2020 9:13:39 PM
Documentales68.41 GB9/13/2020 8:55:20 PM
Doramas [TX]10.40 GB9/13/2020 10:10:36 PM
Filmes [AVI-MKV-MP4]14.26 GB9/13/2020 9:47:14 PM
Filmes [AVI-MKV-MP4] Clásicos Recomendados]17.52 GB9/13/2020 10:13:45 PM
Filmes [Clásicos HD]2.17 GB9/13/2020 8:26:42 PM
Filmes [Estrenos HD]39.06 GB9/13/2020 8:43:23 PM
Filmes [Por Sagas,Por Actores o por Genero]30.95 GB9/13/2020 10:16:54 PM
Games4.54 GB9/13/2020 9:27:17 PM
Humor9.16 GB9/13/2020 8:54:14 PM
Interesantes35.56 GB9/13/2020 9:29:49 PM
Miniseries5.63 GB9/13/2020 9:25:12 PM
Música Actualizada [2020]21.49 GB9/13/2020 8:43:46 PM
Musicales, Video Clips [2020]41.60 GB9/13/2020 9:39:21 PM
Novelas en Transmisión [Clásicas][Cap Sueltos]23.33 GB9/13/2020 10:03:31 PM
Novelas en Transmisión [Estrenos][Cap Sueltos]238.19 GB9/13/2020 10:09:53 PM
Series [Dobladas al Español] [Finalizadas]16.57 GB9/13/2020 9:54:29 PM
Series [TX]50.23 GB9/13/2020 9:47:27 PM
Series [TX] Temporada Finalizada [Cap Sueltos]17.29 GB9/13/2020 9:05:23 PM
Series [TX Clásicas]5.85 GB9/13/2020 10:16:16 PM
Series Mangas [TX]13.71 GB9/13/2020 9:51:49 PM
Series TV Shows [TX][Español]64.26 GB9/13/2020 9:53:04 PM
Series TV Shows [TX][Ingles]4.43 GB9/13/2020 9:45:59 PM
Shows Latinos33.56 GB9/13/2020 9:35:26 PM
Trailers [2020]2.54 GB9/13/2020 9:34:43 PM

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Promocionar contenidos para garantizar el sostén

Las matrices tienen un modelo de negocio asociado a la promoción de artistas que incluye la difusión de canciones, discos, videos e imágenes a través del paquete semanal y otros canales.

«Yo les cobraba entre 10 y 15 CUC (USD), hasta 20, a los artistas por promocionarlos en el paquete», cuenta Herbie «El Thunder», uno de los promotores de YoePC. Entre esos artistas estuvo, por ejemplo, Chocolate MC, un cantante cubano de reguetón muy popular en la isla y que hoy tiene más de 58 millones de visualizaciones en YouTube.

Algunos promotores tienen, a su vez, estudios independientes de grabación de música.

Desde hace un año, una habitación de la casa de Miny Cuore se ha convertido en uno de estos espacios. Allí se hace música para distribuir fundamentalmente a través del paquete semanal. Harryson, Wampi y Wildey, artistas urbanos bastante conocidos en Cuba, han pasado por ese lugar. Todo es tan sencillo como llamar, reservar un turno y cantar.

El estudio tiene por nombre Max Pro. Estrecho, bien iluminado en la sala de edición y aislado por completo de la barriada de La Felicia, en Marianao, donde se ubica. Tomó cinco años levantarlo todo.

«Nosotros le damos promoción nacional en el paquete a los artistas que vienen acá», dice la también cantante Miny Cuore. «Su música llega a cada provincia del país, lo que es muy bueno, tanto para el estudio como para los cantantes».

Según Pive, el productor musical de este estudio, la música también se distribuye en centros nocturnos y se mueve de teléfono en teléfono por Zapya, una aplicación china de transferencia offline de archivos muy popular en Cuba. Además, desde hace años la industria musical asociada al paquete semanal está usando otros canales propios de Internet para la difusión, como YouTube, Apple Music, Facebook, Instagram, WhatsApp y Telegram. Miny Cuore, por ejemplo, tiene canciones en Spotify, aunque esa plataforma esté bloqueada para Cuba.

Publicidad y pago por inserción de contenidos: otras formas de mantener la red

Para anunciar los contenidos en promoción, las matrices siguen dos estrategias principales: colocar en varias carpetas el contenido que les llevan los promotores, aunque no se relacione con la temática; y situarlo por encima del resto. En cualquier caso, los promotores pagan para que el contenido se incluya.

Cuando alguien paga para que sus productos se distribuyan en el paquete de forma preferencial, las matrices sitúan este contenido por encima del resto. Para hacerlo, agregan a los nombres de archivos y carpetas algunos caracteres que la mayoría de los sistemas informáticos interpretan como de primer orden, como el espacio, el signo de cierre de exclamación, las comillas, el numeral, el símbolo de dinero y hasta el guion. Así se asegura que tengan relevancia dentro del compendio.

Las matrices no cobran solamente a los promotores, sino también a cualquier persona que las contacte directamente para usar sus servicios de distribución de contenido. De esta forma, el paquete semanal se nutre de revistas y películas cubanas independientes, así como de aplicaciones.

«Tenemos ofertas de 30, 50 dólares y 100 dólares», explica Hansel Promo. Se refiere a varios servicios enfocados fundamentalmente en artistas musicales. Además de insertarlos en el paquete, Crazy Boy los publicita mediante Zapya —la aplicación china de transferencia de archivos de manera local— y en plataformas digitales como YouTube, Spotify, Apple Music, Facebook, Instagram, WhatsApp y Telegram.

La matriz ETRES no concede entrevistas, pero su modelo de negocios incluye la producción e inclusión de publicidad, otro de los sustentos del paquete semanal. En su caso, publicitan emprendimientos con pequeños comerciales que incorporan al final de los shows, los videos de los youtubers y otros contenidos de alta demanda.

En 2018, los logos de 66 negocios privados aparecían en un pequeño video al terminar algunos capítulos de la serie que el youtuber mexicano Alan Estrada (Alan por el mundo) le dedicara a su viaje a Cuba. En la semana del 21 de septiembre de 2020, un comercial adjunto al realityThe Voice mostraba 74 negocios cubanos. Cada uno paga porque su logo aparezca en esos espacios, aunque no guarde relación con el video.

También hay contenidos cubanos que se distribuyen en el paquete sin que medie pago. Así sucede con las películas, las telenovelas, las series policiacas y los telefilmes producidos por instituciones del Gobierno, casi siempre las más populares. Las matrices insertan estos materiales por su alta audiencia; «gratuidad» que no conceden a otros actores, por ejemplo, los youtubers nacionales.

Según Natasha Tenorio Raga, una de las realizadoras de los videos de Bachecubano —un proyecto cubano sobre tecnología con un canal en YouTube—, desde el primer episodio subido a las redes acordaron pagar 20 CUC (USD) a ETRES y a Estudios Odisea para aparecer en el paquete.

«Usamos los servicios de esas casas matrices desde hace años», explica. «Pero desde junio pagábamos el dinero y los videos no salían, o salían atrasados, o salían con publicidad. En fin, un servicio bast1ante inestable. Tanto ella como Erich García Cruz, su esposo y conductor del programa, decidieron que sus producciones solo se difundirían por Internet y no pagarían más por aparecer en el paquete.

Internet en Cuba: ¿los últimos días del paquete semanal?

La expansión de Internet en Cuba está influyendo negativamente en algunos de los negocios asociados al canal offline criollo, aunque no parece estar atacando su esencia. Hasta el momento, el acceso se realiza fundamentalmente a través de datos móviles, con costos todavía elevados para los cubanos con ingresos promedio. Para obtener 14 gigabytes de datos, por ejemplo, los usuarios deben pagar el equivalente a 45 dólares, mientras que 2.5 gigas cuestan unos 8 USD. En julio de 2020 casi 4 millones de usuarios usaban esta vía para navegar en la red de redes desde la Isla.

«No estamos incluyendo ningún tipo de publicidad en el paquete semanal hace como seis meses», dice Juaristi Guede, el fundador y administrador de la agencia publicitaria HighVista. «Todos los servicios que tenemos son en Internet. Las plataformas online nuestras les llegan a más personas que el paquete», agrega. Sin embargo, ETRES, la otra publicitaria más conocida —y también casa matriz—, continúa adicionando publicidad al final de los videos, como es habitual.

La situación de HighVista es muy similar a la del grupo de programación SIEM. Durante cinco años, SIEM accedió al paquete e insertó, pagando, aplicaciones móviles. Para abrir esos pequeños programas, había que transferir cerca de 2 dólares de saldo telefónico y enviar un código generado en el teléfono o tablet. En ese momento, Raymond Sutil Delgado, responsable de SIEM, enviaba de vuelta otro código para usar todas las aplicaciones a disposición en el paquete esa semana.

«Hace más de un año que estamos inactivos», revela Raymond. «En la actualidad, en el paquete aparecen juegos que pusimos años atrás. El grupo SIEM, hasta ahora, es pasado». Su desaparición coincide, justamente, con el desarrollo de los datos móviles en Cuba, aunque Raymond explica que estuvo tiempo fuera de La Habana y luego siguieron las restricciones de movimiento por la COVID-19.

Mientras la publicidad y la promoción musical miran hacia Internet, Ale Odisea cree que más conectividad significará crecimiento para el paquete semanal y no su desaparición. Hoy las personas envían a Estudios Odisea enlaces con contenido para descargar, dice, y pone ejemplos de manera general: audiovisuales chilenos, películas indias…

«El paquete no va a desaparecer porque haya más Internet en Cuba», asegura YoePC desde su teléfono, pero hace una acotación. «Si el Internet llega a ser accesible para todos, y a precios módicos, va a bajar bastante la venta, pero no va a desaparecer, porque es más fácil entrar a una carpeta donde todo está organizado y listo para que tú escojas lo que quieres ver».

A pesar de que Internet no es un competidor violento del paquete en Cuba, existen series audiovisuales cubanas de realizadores independientes que han debutado exclusivamente en la red. Tal es el caso del dramatizado 10 latidos por segundo y el humorístico Vestuario o maquillaje.

Con todo este panorama, el Gobierno ha preparado el terreno legal para hacerle frente a la principal vía de distribución offline de los cubanos: intenta desplegar un sistema de televisión por cable con una programación diferente a la que se transmite actualmente de manera pública. Según las ofertas comerciales que el Ministerio de Comercio Exterior (Mincex) propone a empresarios radicados en el extranjero, desde 2015 se busca una inversión de 6 millones de dólares para establecer «un servicio de paquetes de canales temáticos al alcance de la población, en alta definición y a un precio asequible». Entre los resultados esperados está satisfacer «la amplia demanda de la teleaudiencia que se encuentra ávida de consumir productos culturales y de entretenimiento». Sin embargo, se precisa que «la parte cubana siempre definirá y controlará el contenido audiovisual a producir». Esa parte cubana es la empresa RTV Comercial y se subordina al Instituto Cubano de Radio y Televisión (ICRT), cuyo presidente lo elige el Consejo de Estado cubano.

Hasta el momento, no se conoce ningún inversor interesado en el proyecto. Aun así, el Ministerio de Economía y Planificación, en un documento de 2020 que anuncia cambios económicos sin muchos detalles, mencionó que se evaluará «la factibilidad de ofertar servicio de televisión por cable a las personas naturales en los lugares donde el alcance de la infraestructura lo permita».

«El paquete estará presente como una opción de interés social mientras la televisión en Cuba y sus productos sean los que hasta ahora quieren ofertar al ciudadano», opina Victor Aday, un usuario del paquete semanal que considera mala casi toda la programación televisiva cubana. «Mientras el ICRT esté centralizado y controlado por un departamento ideológico, el paquete estará presente en la sociedad cubana».

«Aquí en Cuba hoy algo funciona y mañana, no», dice Luis, el paquetero, sentado frente a su computadora. Es martes por la noche y la pantalla del monitor de la computadora atenúa la oscuridad de su cuarto. Sobre la mesa de la habitación hay ocho discos en proceso de copia, en otra silla descansan otros cuatro que ya están llenos y otros cuatro están en fila junto a seis memorias USB. «A lo mejor, de aquí a unos años aparece otra cosa, pero mientras exista el paquete semanal, lo voy a seguir utilizando

EL PAQUETE SEMANAL, MÁS DE UNA DÉCADA RODANDO POR TODA CUBA

Conoce más en este video sobre el funcionamiento del paquete semanal: cómo se elabora y distribuye por todo el país. También hablamos sobre las perspectivas de esta red offline de distribución de contenidos digitales en un escenario de mayor acceso a Internet.

NOTA

CREDITOS

REPORTERÍA Y REDACCIÓN: Glenda Boza, Darcy Borrero, Jessica Dominguez, Jaime Masó, Pedro Sosa, Sabrina López, Alberto C. Toppin.

DISEÑO: Wendy Valladares.

ILUSTRACIONES: Wimar Verdecia.

GESTIÓN DE AUDIENCIAS: Yery Menéndez.

GESTIÓN DE REDES SOCIALES: Beatriz Valdés, Enrique Torres, Sandra Madiedo, Jorge Carlos de la Paz, Eliany Justiniani.

PROGRAMACIÓN: Datalis.

COLABORADORES DE LA AUDIENCIA: Jesús, Yaisel Lambert Cuellar, Víctor Marquez, Alejandro Collantes, Alba Graciela, Alejandro González, Odalis, Mark, José Caneda, Victor Aday, Conrado Cruz, Yosján.

PRODUCCIÓN AUDIOVISUAL: Iván del Toro, Hitchman Powel, Alejandro Ulloa.

COORDINACIÓN GENERAL: Ana Lidia García.

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