Por Joseph Fiftsankis – Cortesía de intelNews.org
A principios de esta semana se informó que el representante Mike Rogers (R-MI), que visitó Israel con carácter oficial la semana pasada, dijo que no creía que Israel atacaría a Irán antes de las elecciones presidenciales estadounidenses de noviembre. AP Photo/Pablo Martinez Monsivais
Un congresista de los Estados Unidos, quien preside la Cámara de Representantes de EE.UU. del Comité de Inteligencia, dijo que fue testigo de un “cambio brusco” entre el Primer Ministro israelí y el embajador estadounidense en Israel, sobre el programa nuclear iraní.
A principios de esta semana se informó que el representante Mike Rogers (R-MI), que visitó Israel con carácter oficial la semana pasada, dijo que no creía que Israel atacaría a Irán antes de las elecciones presidenciales estadounidenses de noviembre.
Pero en un radio de entrevista con la estación de WJR con sede en Detroit el jueves, Rogers dijo que pensaba que los líderes israelíes estaban “al final no sabía qué hacer” más de lo que describió como la indecisión de la administración de Barack Obama en respuesta al programa nuclear iraní.
El político republicano dijo que la reunión a la que asistió en la oficina del primer ministro israelí se suponía que era una “discusión sobre temas de inteligencia y técnica”. Pero rápidamente “se salió de control”, dijo, cuando el líder israelí supuestamente criticó al embajador de EE.UU. en el país, Dan Shapiro, sobre la falta de voluntad percibida del gobierno de EE.UU. para ir más allá de la imposición de las sanciones diplomáticas contra Irán.
Rogers describió la situación como “una gran tensión […], de cambio muy fuerte” entre los dos hombres, que revelan “las preocupaciones elevadas por parte de los israelíes” sobre el despliegue estancamiento nuclear iraní.
En respuesta a una pregunta del entrevistador, Rogers agregó que no creía que él había presenciado “un enfrentamiento de alto nivel” entre un representante del gobierno estadounidense y un funcionario extranjero.
Cabe señalar que, la semana pasada, tras la reunión entre Netanyahu y Shapiro, los medios de comunicación israelíes, afirmó que un “enfrentamiento” había tenido lugar, que se había convertido en un poco diplomática “a gritos”. Sin embargo, el embajador de EE.UU. informó a los periodistas el día siguiente, desestimando reportes de los medios de un enfrentamiento como “tonto”, e insistió en que las cuentas públicas de su reunión con el primer ministro israelí “no refleja lo que realmente ocurrió en la reunión”. Describió a este último como “completamente agradable y profesional”.
Representante Rogers es un defensor de la “acción fuerte” contra el programa nuclear del gobierno iraní y parece ser ponerse del lado de los israelíes en este caso. Sin embargo, si su cuenta de la confrontación Netanyahu-Shapiro es preciso, en clara contradicción con las garantías de la administración Obama de que Washington y Tel Aviv ver ojo a ojo sobre la cuestión nuclear iraní.
