El principal militar de los Estados Unidos, el General Mark Milley, encabezó acciones secretas en noviembre del 2020 y enero del 2021 para evitar que un errático y enloquecido Donald Trump pudiera lanzar ataques militares e incluso nucleares contra países como Irán o China en un intento por desviar la atención tras su amarga derrota electoral.
Milley, Presidente de la Junta de Jefes de Estado Mayor (cargo que sigue ocupando en la actualidad), ordenó a sus subalternos del Centro de Comando Militar Nacional que no cumplieran ninguna orden militar a menos que él estuviera involucrado en el proceso, según revelaciones de “Peril”, un nuevo libro del legendario periodista Bob Woward y de Robert Costas, reportero de The Washington Post.
Las preocupaciones de Milley sobre el comportamiento errático y oscuro de Trump eran compartidas también por la entonces Directora de la CIA, Gina Haspel, y por la titular de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, quien creía que el Presidente se comportaba como “un loco”.
El general Milley incluso tuvo que dar seguridades telefónicas a su similar de China, Li Zuocheng, en noviembre, en momentos en que Pekin llegó a creer que la retórica de Trump presagiaba un inminente ataque militar.
