Por José R. Alfonso
La esencia fundamental de la Guerra de Cuarta Generación es la utilización intensiva de los medios de comunicación de toda naturaleza para un objetivo político.
Miami no es ajeno a los conceptos de la Guerra de Cuarta Generación, en la Fase de Guerra Mediática, más importante que la bélica ya que su poder consiste en apoderarse de su mente, de su conducta, de sus emociones, de sus contradicciones y vulnerabilidades psicológicas en un campo tan fértil como lo son los exiliados históricos, y muchas veces histéricos, de origen cubanoamericano que fueron derrotados por Castro en 1959 y los que con razón o sin ella, fueron posteriormente nacionalizados, encarcelados y fusilados luego de múltiples esfuerzos por eliminar su régimen, y a sus líderes, por la vía armada, para refugiarse más tarde, y en masas, en el Sur de la Florida, anhelando y soñando sobre todo con eliminar a los causantes de sus desgracias: Los Castro.
Campo psicológico extremadamente fértil, de sentimientos, odios, sed de venganza, distorsión de la verdad, mentiras, miedos, terror, manipulación, exageraciones con prisión y torturas terribles a los opositores, asesinatos y desapariciones, todo ello dentro del marco de un persistente bombardeo mediático, con el fin de anular la capacidad cerebral de decidir por usted mismo, de anular su pensamiento reflexivo (información, procesamiento y síntesis) y sustituirlo por una sucesión de imágenes sin resolución de tiempo y espacio (alienación controlada) todo ello muy bien aprovechado y manejado, más en favor de beneficios financieros que patrioticos, por un reducido grupo de influencia y poder de ese mismo grupo étnico que controlan la política local, la economía y que sin ser expertos comunicacionales, en insurgencia, contrainsurgencia, analistas políticos, analista de estructuras de poder o especialista en inteligencia y comunicación estratégica sin embargo han sabido manejar estas operaciones psicológicas dentro de los medios de comunicación social no manipulando su conciencia sino sus deseos y temores inconcientes para así controlarlo y manejarlo convirtiéndolos a su vez en victima y victimario para que ustedes no piense ni analicen información (qué, porqué y para qué de cada información) para finalmente convertirlos en consumistas de órdenes psicológicas direccionadas a través de sus emisiones mediáticas.
Por ello no es extraño que los principales medios radiales hispanos del Sur de la Florida, controlados por cubanoamericanos del exilio histórico, y no tan histórico, principalmente las emisoras WWFE 670AM “La Poderosa”, de propiedad privada y la WAQI 710AM “Radio Mambí La Grande”, perteneciente a la Cadena Univisión Radio, las que mantienen una larga y sistemática campaña mediática de satanización en contra del Partido Demócrata y de desmitificación de la figura de Barack H. Obama, Presidente de los EE.UU. -de forma similar a la labor que realizan también sobre Hillary Clinton- los que se aprovecharon en esta ocasión del saludo manual -darse la mano- efectuado entre el Barack Obama, dignatario estadounidense, y Raúl Castro Ruz, Presidente de la Republica de Cuba durante el encuentro efectuado en Johannnesburgo en honor a Nelson Mandela llevado a cabo en su Memorial, para exacerbar una vez más a sus radioescuchas, de origen cubanoamericano, en una campaña negativa sobre la figura presidencial por medio de sus editoriales, programas de opinión y de micrófonos abiertos como es ya costumbre.
Los radióescuchas de ambas emisoras, calificados también por muchos como radiópacientes -por su patalógica obsesión compulsiva en contra del régimen de La Habana y los Castro- voces que son ampliamente conocidas en estos medios e incluso son llamados por sus nombres de pila por los conductores de los diferentes programas y los que constituyen una masa critica integrada mayoritariamente por personas de la tercera edad virulentamente anticastristas y defensores a ultranza del Partido Republicano, y en menor escala del Partido del Té, por cuyos candidatos votan como “ganado electoral” en épocas de elecciones.