Cuba: los árboles y el bosque

Por *Alina B. López Hernández.. Se pueden ver los árboles y no el bosque, asumir el fenómeno sin apreciar la esencia y tomar lo aparente por lo real. Tratar de comprender y explicar lo que ocurre en Cuba reduciéndolo al Movimiento San Isidro, o a los hechos inéditos  de un grupo numeroso de artistas e intelectuales que se congregaron a las puertas del Ministerio de Cultura exigiendo ser atendidos; es un tremendo error de apreciación.

Por *Alina B. López Hernández. — — 12 Comentarios

I

Se pueden ver los árboles y no el bosque, asumir el fenómeno sin apreciar la esencia y tomar lo aparente por lo real. Tratar de comprender y explicar lo que ocurre en Cuba reduciéndolo al Movimiento San Isidro, o a los hechos inéditos  de un grupo numeroso de artistas e intelectuales que se congregaron a las puertas del Ministerio de Cultura exigiendo ser atendidos; es un tremendo error de apreciación.

El marxista italiano Antonio Gramsci argumentaba que en tiempos de cierre del horizonte político, las contradicciones tendían a emerger en las diferentes manifestaciones de la cultura nacional. Pero los científicos sociales tenemos el instrumental, la preparación y el deber de ofrecer análisis que permitan ir más allá de lo anecdótico, lo casuístico y lo coyuntural para hacer las preguntas necesarias.

Las apelaciones constantes del presidente a destrabar las fuerzas productivas ofrecen el primer nivel de análisis. Al tema me he referido en varios textos, uno de ellos es «Pulgas o Dragones», que data de dos años atrás:

En Cuba se manifiesta un estancamiento de las fuerzas productivas, reprimidas por relaciones de producción que se deci16den a nivel político, por ello, sin cambios en esa esfera no avanzaremos. El marxismo considera como una ley la correspondencia entre las relaciones de producción y el carácter de las fuerzas productivas, pues cuando no se manifiesta tal correspondencia, se abre un camino que puede determinar la transición de un régimen social a otro.

En la economía cubana nada es verdaderamente lo que parece. Las relaciones de propiedad, núcleo de las relaciones de producción, se manifiestan como una mistificación de la realidad: la propiedad socialista no es verdaderamente social, ya que ha sido suplantada por una propiedad estatalizada que escapa al control de los trabajadores; y la propiedad privada —reconocida en esta Constitución— no es suficientemente privada, dados los excesivos obstáculos con que la rodean las determinaciones políticas. La propiedad cooperativa no despliega sus alas a pesar de todas las declaraciones y lineamientos que en el mundo son.

Este no ser realmente lo que se pretende nos ha llevado a un punto de inmovilidad. El nuevo presidente recibió una encomienda que parece hecha a la medida de Tom Cruise. Pero con su loable actitud de una mayor comunicación mediática ha enjuiciado abiertamente lo que era evidente desde inicios del año anterior: la crisis se ha agudizado, lo seguirá haciendo en el próximo año y la economía insular apenas crece. En las intervenciones del Ministro de Economía se critica el modo en que se había administrado hasta ahora ese sector, se adivina la intensión de renunciar a prácticas equivocadas, pero no se distingue un proyecto novedoso y bien concebido para generar cambios. 

Mi opinión es que presenciamos el agotamiento definitivo de un modelo político, el modelo de socialismo burocrático. Nuestros gobernantes no logran hacer progresar la nación con los viejos métodos, pero no son capaces de aceptar formas más participativas, con un peso mayor de la ciudadanía en la toma de decisiones.

Ver: https://www.codigoabierto360.com/movimiento-san-isidro-msi-protesta-frente-al-mincult-en-la-habana-cuba/

Como resultado, en Cuba se vislumbra hoy una situación que, en dependencia de diversos factores, puede tornarse revolucionaria o contrarrevolucionaria. Cuando Lenin fundamentó su teoría de una situación revolucionaria, lo hizo para explicar el contexto ruso tras los sucesos de 1905. Trotsky la aplicó para la Inglaterra de 1931 y la Francia de 1936. ¿Qué impide que la utilicemos para entender lo que ocurre en Cuba actualmente? Si obviamos las marcas de contexto en que ambos dirigentes revolucionarios actuaban nos queda lo esencial, veamos:

A. – “La primera y más importante premisa de una situación revolucionaria es la exacerbación intolerable de las contradicciones entre las fuerzas productivas y las formas de propiedad. La nación deja de avanzar”. (Trotsky: ¿Adónde va Francia?, 1936).

B.- No basta con que los de abajo no quieran seguir viviendo como antes. Hace falta, además, que los de arriba no puedan seguir administrando y gobernando como hasta entonces. (V. I. Lenin “La celebración del Primero de Mayo por el proletariado revolucionario”).

En Cuba están maduras desde hace tiempo las condiciones objetivas para una transformación. Es indudable que la nación dejó de avanzar: la economía no crece desde hace años, la deuda externa aumenta constantemente, igual que los niveles de pobreza, y, a pesar de ello, las reformas han sido demoradas de manera inexplicable. Es evidente que «los de arriba» no pueden seguir administrando y gobernando como antes. Pero ¿qué ocurre con «los de abajo»?

Sin la maduración del factor subjetivo esa transformación no era posible. Se requería la voluntad de querer cambiar de las personas, una energía cívica que había sido aplastada por condicionamientos políticos, educativos y mediáticos. La «indefensión aprendida» también existe en un modelo socialista en el que el sistema controla en cierta medida la manera de comportarse de sus ciudadanos.

Faltando el factor subjetivo, las condiciones objetivas por sí solas no determinarían nada. Sin embargo, actualmente existen señales muy claras de su existencia. Tales signos no han sido entendidos por el aparato ideológico, que se equivoca al reducir las manifestaciones de descontento a «un golpe blando», a «una manipulación generalizada», o a la «creación de matrices de opinión negativas sobre el gobierno». No niego de plano que ello también ocurra y más adelante me referiré al asunto. La dirección del país no termina de ubicarse en:

1.- El novedoso entorno que ha creado el acceso masivo a internet y las redes sociales, que los ha privado del monopolio absoluto de la información que tuvieron por décadas y ha democratizado su difusión y generado la posibilidad de campañas y denuncias ante arbitrariedades.

2.- Un estado de permanente polémica, visible en las redes y fomentado por la propia dirección del país a raíz de la consulta popular para la redacción de la nueva Constitución; quizás pensaron que al concluir la referida consulta y no requerirse más de nuestros puntos de vista cesaríamos de ofrecerlos. Ingenuo de su parte, ahora tenemos cómo y no necesitamos de sus convocatorias.

3.- La declaración de Cuba como un Estado Socialista de Derecho que visibilizó mejor las prerrogativas de cubanas y cubanos y los compulsó a exigir libertades que la propia Constitución garantiza.

4.- La existencia de generaciones jóvenes, cuestionadoras per se, que han encontrado repercusión en generaciones mayores, ya cansadas de promesas incumplidas y reformas demoradas o interrumpidas.

El novedoso entorno que ha creado el acceso masivo a internet y las redes sociales, que los ha privado del monopolio absoluto de la información que tuvieron por décadas y ha democratizado su difusión y generado la posibilidad de campañas y denuncias ante arbitrariedades.

Un estado de permanente polémica, visible en las redes y fomentado por la propia dirección del país a raíz de la consulta popular para la redacción de la nueva Constitución; quizás pensaron que al concluir la referida consulta y no requerirse más de nuestros puntos de vista cesaríamos de ofrecerlos. Ingenuo de su parte, ahora tenemos cómo y no necesitamos de sus convocatorias.

II

San Isidro no es un movimiento político, aunque sus demandas lo sean. Les falta cohesión, una estrategia que trascienda y un programa claramente expuesto. No me caben dudas de que la mayoría de sus miembros son artistas e intelectuales, aun cuando la narrativa oficial los presente como un grupo de delincuentes. El hecho de que algunos de ellos se hayan declarado favorables a recrudecer el bloqueo contra Cuba y que manifestaran su apoyo al gobierno de Donald Trump no les permite un liderazgo real de la opinión pública. Pero a mi juicio, lo más grave es lo que se infiere de las declaraciones de Omara Ruiz Urquiola el 28 de noviembre. Valoro esa intervención como su suicidio político: por el alto grado de sectarismo que promueve, su elitismo al referirse despectivamente a miembros de su propio movimiento que no considera intelectuales y su negativa absoluta a dialogar.

A pesar de lo dicho, MSI tendrá siempre el mérito de una actitud cívica de desobediencia sostenida frente a un aparato represivo que utilizó contra ellos métodos ilegales desde mucho antes de que se declararan en huelga de hambre. Precisamente fue esa represión ilegal y el tratamiento inhumano que se dio a personas en su situación, incluyendo el modo en que fue interrumpida esa huelga, el catalizador de la dignidad cívica de un grupo de artistas e intelectuales que fueron a manifestar, ante su ministerio, la condena pública a dicha represión.

De los que pudimos estar al tanto de la manifestación, pocos dormimos esa noche. El poder de convocatoria que lograron los congregados ante las puertas del MINCULT, no se explica solo por las redes sociales. Había mucha necesidad de ser auténticos, de dejar de ser meros espectadores y de participar en la vida nacional. Décadas de disciplina y obediencia, de manejos internos y discretos del disenso en el sector, murieron en esa calle del Vedado habanero.  

Es cierto que el carácter gremial de esa manifestación deja fuera muchas demandas, pero es un paso inicial, sobre todo por el ejemplo que significa y por el claro mensaje de que para obtener respuestas hay que utilizar vías de presión ciudadana ante el gobierno.

Llegados al punto en que se encuentra Cuba hoy, los caminos para un cambio social pueden ser dos: pacífico o violento. El primero de ellos, al que me adscribo totalmente, significaría aprovechar los espacios legales —muchos de ellos que habría que crear primero—, para presionar por cambios económicos, políticos y jurídicos dentro de un diálogo nacional en que no haya discriminación por motivo de credos políticos.

En la vertiente de proponer dicho diálogo, un grupo de intelectuales preocupados por la situación de Cuba, redactó un documento que ha sido firmado por muchas cubanas y cubanos, de dentro y fuera de la Isla, y que recibe continuamente nuevas adhesiones. Denominado «En articulación plebeya», circula en las redes sociales y en varios sitios y publicaciones. No se pretende liderar nada, solo proponer un camino. Quizás existan otras propuestas por el estilo.

En la perspectiva de utilizar vías violentas, se pueden apreciar en las redes declaraciones de personas molestas porque consideran ilegal al gobierno y le niegan la legitimidad para ser una de las partes dialogantes. Mucho más grave aún es el uso de plataformas sociales como WhatsApp y Telegram para incitar a actos violentos entre la juventud. Lo que afirmo lo hago con total responsabilidad. Ayer entré a uno de esos grupos donde fui invitada y vi el modo en que, desde dos números telefónicos ubicados fuera de Cuba, se incitaba a actos violentos y se estimulaban las justas reclamaciones de muchachas y muchachos cubanos por espacios de manifestación pacífica. Confieso que no he podido descansar desde ese instante.    

Alerto que es un momento gravísimo en este país. Se reúne un potencial conflictivo en un escenario que está siendo muy mal analizado, no solo por el gobierno sino también, infelizmente, por intelectuales y científicos sociales a los que su formación teórica y su habilidad para interpretar los hechos sociales debería separarlos de una declaración meramente ideológica como la que diera a conocer, el propio 27 de noviembre, el Departamento de Filosofía de la UCLV. Firmaron ese documento colegas a los que aprecio y agradezco, pues en ese prestigioso centro me hice Doctora en Ciencias Filosóficas, pero es momento de servir a la ciencia y a la nación. Esa declaración le hace el juego a la manera en que fue presentado el disenso en el programa especial de Hacemos Cuba, como hijo exclusivo de intereses foráneos, gente confundida y manipulada por las redes. Ello enmascara la realidad.

Son nuestras muchachas y muchachos, dialoguemos con ellos y con la sociedad civil cubana que desea caminos de cambio y de paz. Si se escoge por el gobierno la confrontación violenta como respuesta, puede ocurrir, a gran escala, lo que ya vimos en el Vedado: un grupo pacífico de jóvenes rociados con gas pimienta; o lo que ocurrió en el Parque de la Libertad de Matanzas en la noche del sábado: un pequeño grupo que fue golpeado por miembros de la Seguridad del Estado. No importa que impidan el acceso a internet por algunas horas. Todo se conoce y se enjuicia.

Mi conciencia no me permite callar.

*Alina B. López Hernández es Profesora y Tutora de Antropología Sociocultural y una excelente Científica Social y Política (socióloga y politóloga) de la Universidad de Matanzas. Miembro Académico Nacional Correspondiente de la Academia de Historia de Cuba. Además de Analista Sociopolítico laureada de La Joven Cuba. Para contactar al autor: [email protected]

12 Comentarios

1.- Luis Alberto 30 noviembre 2020 At 7:37 AM

Luego de leer el artículo, primero deseo que intelectuales comprometidos como usted profesora, pudieran acceder a los medios oficiales y emitir criterios que generen el debate necesario para lograr ese desarrollo tan esperado por millones de cubanos.

Hasta cuándo los que pensamos diferente vamos a ser etiquetados de delincuentes, manipulados, incluso mercenarios. Nuestra sociedad está necesitando cambios fundamentales que para nada considero contrarrevolucionarios, o es que nuestro sistema supera el perfeccionamiento necesario a toda obra humana?

Por otro lado considero que la «respuesta espontánea» sólo demuestra falta de solidez como la que evidencia la agenda política del MSI. Insto a mis conciudadanos a estudiar con seriedad el ámbito actual y tomar acciones consecuentes.

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2.- Camacho 30 noviembre 2020 At 7:38 AM

Con la internet, y el fin del monopolio de la información todo ha cambiado, todo es diferente y por tanto el monopolio político del PCC, ya no tiene futuro. Podrán poner mil parches, pero sólo lograrán demorar el desenlace, que pena que por empecinamiento y falta de visión, no colaboren y hagan más fácil la transición.

El PCC no solo es responsable por la Cuba presente y todos sus problemas, también va a ser responsable de muchos de los problemas de la Cuba futura, el daño es mucho y ojalá no sea irreparable. Pero tengo esperanzas y muchas, al ver esa nueva y verdadera vanguardia que comienza a hacer por esa nueva Cuba, en sus propias narices y que ya va buscando la verdad y su propio espacio, nada tienen que perder y mucho que ganar. En hora buena cara!

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3.- Revenge 30 noviembre 2020 At 8:32 AM

Yo tambien estoy preocupado por la gravedad de la situacion socioeconomica en Cuba.

Hay un nivel de precariedad material y existencial que amenaza con bordear en una crisis humanitaria; sin soluciones a la vista mas alla de esperar ‘que trae’ la nueva administracion estadounidense.

Las raices de la agudizacion de esta situacion -como usted misma ha planteado- se remontan a mucho antes de la propagacion del Covid en Cuba, en mi opinion concretamente a la casi desintegracion de los programas de cooperacion medica en aquellos paises donde mas dinero recaudaban.

Habia tiempo para implementar reformas que comenzaran a compensar asap la perdida de estas fuentes de divisa fresca, sobre todo que minimizaran su impacto en la alimentacion y la disponibilidad de medicamentos y otros bienes esenciales. En su lugar, se ha preferido sustituir un tubo de dinero por otro, apelando a seguir exprimiendo economicamente a la emigracion; lo cual no tuvo poca influencia en el sustancial apoyo recibido por el candidato Trump dentro de la comunidad cubanoamericana.

El todo acompañado de un lenguaje que pasa con velocidad inusitada de la zoqueteria y la imposicion a la ensoñacion lirica; de la argumentacion financiera, a desvarios utopicos sobre saberes y cientificismos..

Nuestro gobierno lo mismo le cae a gas pimienta y palos a un encierro pacifico de jovenes; que insiste en la ‘persuasion’ como mejor politica para tratar a coleros y traficantes que especulan con las escasas mercancias que llegan a nuestras tiendas.

Nuestro gobierno ofrece medicos al pais enemigo y considera ‘presion’ o ‘subversion’ que un grupo de sus propios ciudadanos le reclame atencion. Por si fuera poco, el mismo reclamo que un gobierno dizque popular desatendio siendo planteado por un grupo de jovenes mestizos y negros en su mayoria, desempleados y en situacion de precariedad social; es escuchado cuando quienes lo enarbolan son personas pertenecientes a una elite intelectual y economica, hombres de edad y blancos por añadidura.

4.- Se ha llegado al extremo de utilizar como ‘argumento en contra’ del MSI, la condicion de desempleo, pobreza y marginalidad de muchos de sus miembros. Con la desesperacion halando por un lado, y la obcecacion por otro; o no nos movemos, o nos despedazamos.

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5.- dario45666 30 noviembre 2020 At 9:09 AM

El tratamiento respetuoso ,cariñoso,elogioso,algunas veces rayano en la idolatria a ese accidente en la vida de la Republica que es la » Revolucion Comunista Cubana» y mas reverente aun a su Lider y Corte,impide hacer valoraciones de peso y mantienen confundidos a nuestro pueblo.

Hablando en plata y a los ojos de un ciudadano del monton (no marxista), de un ciudadano con ideas liberales, ?de que revolucion estamos hablando?.

Que revolucion marxista hacia falta en una Republica que, habiendo nacido en la miseria y el caos hacia 50 años mostraba unos logros tanto sociales como politicos que podin ser orgulo de su pueblo?

La revuelta popular,de todos los cubanos contra el tirano y por una vuelta a las vias constitucionales y al progreso por medios civilizados,resulto en el caldo de cultivo para que, los especialistas en la toma del poder por la fuerza y mediante el terror,se hicieran amos de Cuba.

Que hemos logrado ? Esta a la vista : Nuestros Paradigmas,derrotados por la practica cotidiana; lo logrado, desecho;el futuro, incierto, la Republica destrozada y las libertades desaparecidas. En su lugar se alza la republica de la Baba,del espejismo, de la igualdad, de la justicia, de la Potencia militar, cientifica, tecnica, del acceso lbre a la educacion, a la medicina, todo de mentirita y para colmo : «dentro de la Revolucion,todo ,fuera ,nada de nada «.

Basta de hablar de Revolucion y de marxismo, lo que tenemos,despues de 60 años y una enormidad de recursos,vidas y sacrificios malgastados, es una ruina rodeada de alambres de puas y una parte de la poblacion,lista para comerse a la otra.

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6.- Sebastien 30 noviembre 2020 At 9:19 AM

Alina, dors tranquille, j’ai déjà envoyé renforcer les garnisons de La Bastille et de Las Tuilleries.

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7.- Pedro Lorenzo 30 noviembre 2020 At 9:23 AM

Leo en Ecured:

«La Protesta de los Trece constituyó un ejemplo de cómo los jóvenes intelectuales asumían una posición combativa ante lo mal hecho.»
«(Mella) En 1926 fue expulsado de la Universidad de la Habana por sus acciones revolucionarias y de rebeldía, siendo además detenido por las autoridades, en la cárcel se declara en huelga de hambre.

El Comité Pro-Libertad de Mella inicia una campaña para liberarlo, la presión nacional e internacional se hace sentir, y se le libera el 23 de diciembre del propio año, se embarca entonces rumbo a Honduras.»

Así lo estudiamos desde niños, incluso extracurricularmente en los «comics» del semanario «Pionero «. De lo contradictorias que terminaron siendo las trayectorias políticas de los participantes de la primera o del incumplimiento de la disciplina partidista y las consecuecias que por ello tuvo que enfrentar Mella en el caso de la segunda, ni palabra.

Al grano: Muy pocos procesos y gestores históricos resistirán el microscopio de alta definición que algunos pretenden aplicar a los sucesos actuales. Como insiste en decir la autora del escrito, que suscribo al pie de la letra: «Por favor,el bosque y no los árboles «.

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8.- Jagger Zayas Querol 30 noviembre 2020 At 9:28 AM

El análisis en las altas esferas de dirección del país del documento, hasta ahora secreto, «Estudio del clima sociopolítico de la sociedad cubana» en las últimas semanas, indica que ellos tienen real percepción y preocupación de todo lo que está ocurriendo y si la sensatez se impusiera en esos circulos, tanto en palomas como halcones que los integran, podría haber una salida democrática y pacífica, mediante el diálogo y la negociación al enorme descontento de la poblacion cubana, y abrir las puertas para la destrabazon económica, politica y social que vivimos sin renunciar al Socialismo que nuestro pueblo, mayoritariamente, quiere.

Por el contrario, si se impone la tozudez y la terquedad de la línea dura, con represion y la fuerza, confiados en el capital político de antaño y hoy inexistente, entonces ellos serán los responsables ante la Historia del Holocausto al que conducirán sus acciones y omisiones y destruyendo la obra de la Revolución Cubana, abriran las puertas al perfido proposito de los EEUU y la oligarquía imperialista internacional de ahogar en sangre el ejemplo que un día fue nuestra Revolución para el mundo entero.

En este segundo escenario, la Historia no los abdolvera.

Gracias, Dra. Alina por su argumentado artículo y le pido que no ceda ante los reclamos para que su pluma se calle, tanto por los heraldos de la muerte de la contrarrevolución, como por los genuflexos de la burocracia estalinista.

Como dijo nuestro Apóstol, «hay hombres sin decoro, pero hay hombres que tienen el decoro de muchos hombres»
Gracias nuevamente!

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9.- Luis 30 noviembre 2020 At 9:40 AM

Muy certero su análisis. Sin embargo, quisiera preguntarle:

Considera equivocado el actuar de las autoridades al intervenir la protesta teniendo en cuenta que se violaban los protocolos establecidos con relación a la pandemia? Por supuesto, les vino como anillo al dedo, pero considera que el actuar no estuvo en ese caso específico apegado a la ley? Saludos

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Ivette García 30 noviembre 2020 At 11:52 AM

Gracias Alina por este texto tan oportuno y bien argumentado, como siempre. Tu aporte es muy importante porque contribuir al buen discernimiento de las personas honestas que aman a Cuba por encima de todo. Ya lo compartí y comenté, pero quería hacerlo también en este espacio que es muy seguido por muchísimas personas. Como diría Chesterton “A cada época la salva un pequeño puñado de hombres que tienen el coraje de ser inactuales”. Por supuesto «hombres» en el sentido génerico de acuerdo su época.

Y yo diría, que también tengan la inteligencia y la sepan poner junto con la honestidad en el lado correcto.

Nos hacen falta más intelectuales inactuales como tú.

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10.- Carlos 30 noviembre 2020 At 12:39 PM

Cada dia la casta gobernante mas burocratica, mas represiva, mas distanciada del pueblo, mas comoda en sus mansiones, mas lejos de servir como deberia de ser. Para el 2030 tendremos un socialismo prospero y sostenible.

El pueblo, cada dia mas pobre, mas separado por la emigracion, mas reprimido, mas angustiado y sin esperanzas. Para el 2030 se multiplico lo que existe hoy, la miseria y sombras que han dejado estos mas de 60 años de totalitarismo.

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11.- Gustavo Arcos 30 noviembre 2020 At 12:57 PM

En efecto, el eco de las.polarizaciones que vimos en EEUU y particularmente en Miami, con los cubanos llevando la voz cantante, los hemos visto reproducirse en los últimos días en Cuba.

Al parecer, solo existen dos opciones para Cuba: o apoyas a San Isidro o a los jóvenes del parque Trillo. Como si una, excluyera la otra, como si pudiera hablarse de una nación, sólo, en función de la adhesión que se haga a sus extremos.

Realmente es algo que hemos visto crecer durante siglos en Cuba y que todos conocen por la frase de que, los cubanos o no llegan , o se pasan, reciclada de alguna forma por aquello de Primero dejar de ser, que dejar de ser revolucionarios.

El cambio, tras 1959, generó, todo tipo de dicotomías, entre los que se quedaban, o los que partían. Entre el hombre nuevo y el viejo, entre el pasado, casi siempre leído peyorativamente y el presente o futuro «luminoso», que nos esperaba bajo el socialismo y la Revolución.

Décadas de exclusión, discursos de odio, ataques y descalificaciones practicadas desde ambos lados del estrecho de la Florida, cosechan ahora estos frutos. Cualquier posicionamiento en un punto medio, implica tambien ofensas y descreditos. Muy triste ver como por unas u otras razones los cubanos nos hemos visto arrastrados hacia esa corriente del enfrentamiento o la destrucción del otro. Nunca ha sido tan necesario como ahora, el diálogo y la concertación.

El universo tiene múltiples colores, pero parece, ahora mismo, que para los cubanos solo existe el que desprende su arrogancia y falta de ética.

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12.- Mvmc 30 noviembre 2020 At 1:11 PM

Siempre esclarecedores sus artículos.

No encuentro algo más cobarde que las arengas desde el exterior. Es fácil instar a las revueltas con las heladeras llenas. Los jóvenes que se plantaron frente al MinCult merecen todo el respeto y admiración, ellos son los que tienen la palabra… los que estamos afuera debemos tener la suficiente vergüenza y evitar darle a las autoridades los descalificadores argumentos que siempre utilizan para enfrentar el disenso.

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