- El Emirato Islámico es una realidad y tenemos que aceptar que no podemos erradicar una institución bien organizada y popular como el Estado Islámico. Por consiguiente, yo pido encarecidamente a mis colegas occidentales que revisen su estado de ánimo hacia las corrientes políticas islamistas, así como a dejar de lado su cínica mentalidad y contrarrestar los planes de Vladimir Putin tendientes a aplastar a los revolucionarios islamistas sirios… declaro Hakan Fidan, jefe de los servicios secretos de Turquía y hombre de confianza del presidente turco Recep Tayyip Erdogan.
Hakan Fidan, jefe de los servicios secretos de Turquía y hombre de confianza del presidente turco Recep Tayyip Erdogan, salió en defensa del Emirato Islámico en una entrevista concedida a la agencia de prensa oficial turca Anatolia, el 18 de octubre de 2015.
El jefe de los servicios secretos turcos declaró:
«El Emirato Islámico es una realidad y tenemos que aceptar que no podemos erradicar una institución bien organizada y popular como el Estado Islámico. Por consiguiente, yo pido encarecidamente a mis colegas occidentales que revisen su estado de ánimo hacia las corrientes políticas islamistas, así como a dejar de lado su cínica mentalidad y contrarrestar los planes de Vladimir Putin tendientes a aplastar a los revolucionarios islamistas sirios.»
Hakan Fidan agregó que es indispensable que el Emirato Islámico pueda abrir un consulado, o al menos una representación política, en Estambul para responder a las necesidades de los numerosos yihadistas que llegan a Turquía con intenciones de unirse a la «revolución» islamista en Siria.
El jefe de los servicios secretos turcos declaró además que Turquía está prestando cuidados médicos a todos los heridos en los «implacables» bombardeos rusos, sin tener en cuenta su afiliación política o religiosa.
En su entrevista, Hakan Fidan acusó a Rusia de violar el derecho internacional en Siria, sin precisar a qué se refería con esa declaración.
El Emirato Islámico, que emprendió una limpieza étnica en Siria e Irak, está clasificado como organización terrorista por el Consejo de Seguridad de la ONU, que además ha exhortado a todos sus miembros a combatir ese grupo yihadista.
En ese marco, a pedido del gobierno legal y legítimo de la República Árabe Siria y en aplicación de las resoluciones pertinentes del Consejo de Seguridad de la ONU, Rusia realiza actualmente una campaña de bombardeos aéreos en Siria.
Turquía, que garantiza toda la logística del Emirato Islámico, no ha reconocido nunca la necesidad de combatir esa organización islamista y llama, por el contrario, al derrocamiento del presidente democráticamente electo de Siria, Bachar al-Assad, y a la instauración de un régimen islámico.
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