Acto público celebrado en Cuba por primera vez para exigir la liberación de la espía estadounidense Ana Belén Montel

Por José Fitsanakis                        –                 Cortesía de IntelNew

Codigoabierto360.com: Ante todo rinde un reconocimiento al valor de los hombres y mujeres de los Servicios Especiales (Inteligencia y de Contrainteligencia) —de aquí, allá o de cualquier otro país—que conscientes de que una nación se sustenta en la capacidad de su comunidad de seguridad interna y externa, trabajan desde las sombras a riesgos de su felicidad personal, y hasta de sus propias vidas, para proveer a sus dirigentes políticos la inteligencia necesaria para que estos puedan proteger la seguridad nacional y ciudadana de sus respectivos países. Foto. Ana B. Montes había sido un valiosos Activo de Alto Valor de la inteligencia cubana (DI) que logro penetrar las mas altas esferas de la  DIA.
Codigoabierto360.com: Ante todo rinde un reconocimiento al valor de los hombres y mujeres de los Servicios Especiales (Inteligencia y de Contrainteligencia) —de aquí, allá o de cualquier otro país—que conscientes de que una nación se sustenta en la capacidad de su comunidad de seguridad interna y externa, trabajan desde las sombras a riesgos de su felicidad personal, y hasta de sus propias vidas, para proveer a sus dirigentes políticos la inteligencia necesaria para que estos puedan proteger la seguridad nacional y ciudadana de sus respectivos países. Foto. Ana B. Montes había sido un valiosos Activo de Alto Valor de la inteligencia cubana (DI) que logro penetrar las mas altas esferas de la DIA.

Un evento público se ha celebrado por primera vez en La Habana para exigir la liberación Ana Belén Montes , un ex analista de inteligencia estadounidense que cumple una pena de 25 años de prisión por espiar a los Estados Unidos para Cuba. El evento parecía ser orquestado  por el gobierno cubano y estaba destinado a reavivar los rumores de que un acuerdo entre Washington y La Habana que ponga en libertad a Montes pueden estar en marcha.

Montes se distinguió rápidamente a sí misma en la DIA, y para mediados de la década de 1990 fue vista como uno de los expertos más conocedores y capaces del gobierno de Estados Unidos en relación a Cuba. Ella fue la autora principal de casi todas las evaluaciones importante en Cuba que fueron producido por la Comunidad de Inteligencia de Estados Unidos en la década de 1990. Pero el 21 de septiembre de 2001, Montes fue detenida por la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) y acusada de haber cometido espionaje a favor de Cuba.

Durante el juicio, los fiscales del gobierno de los Estados Unidos argumentaron que Montes había sido reclutado por la inteligencia cubana antes de unirse a la DIA, y que con el tiempo había comprometido cada programa de recolección de inteligencia de Estados Unidos dirigidas a la isla del Caribe. La ex analista de la DIA también fue acusado de haber dado Habana las identidades de los oficiales de inteligencia estadounidenses que habían operado en secreto en Cuba. 
Ana-Montes-mugshot

En 2002, Montes fue condenado a 25 años de prisión, tras declararse culpable de haber cometido espionaje lo largo de su carrera de 16 años en el DIA.

En los últimos meses, se ha especulado que Montes podría, ser liberada y trasladarse a Cuba. A cambio, La Habana establecería supuestamente extraditar a los EE.UU. Assata Shakur, una ex miembro de los grupos nacionalistas militantes negros en los Estados Unidos, que está acusada del asesinato de 1973 de un policía estatal de Nueva Jersey.

Estos rumores fueron negados por el Departamento de Estado de Estados Unidos en agosto.

La semana pasada, sin embargo, se llevó a cabo en La Habana el primer evento público  para exigir la liberación de Montes. El evento contó con las actuaciones de artistas, así como un discurso de apertura por Manuel David Orrio, un oficial retirado de la Dirección General de Inteligencia de Cuba (DGI). Orio dijo a los presentes en el evento en el centro de La Habana que los comités para exigir la liberación de Montes se habían formado en varias provincias del país, así como en Suecia, Francia, Puerto Rico y la República Dominicana. Añadió que formalmente solicitar la liberación de Montes sería un asunto «muy complejo» y delicado para el gobierno cubano, pero que los grupos de presión sociales eran libres de presionar a los funcionarios de Estados Unidos.

En el pasado, el gobierno cubano ha guardado silencio sobre el caso de Montes, y muy pocos cubanos son conscientes de su existencia. El hecho de que el gobierno está movilizando a los comités populares y otros grupos de presión puede apuntar a un cambio de política de La Habana.

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